Mediante el uso de almacenamiento de energía mediante volantes, esta máquina realiza soldaduras cortas pero de alta potencia (500kW) transfiriendo la inercia rotacional a las piezas de trabajo. La masa del volante está dentro del rango de 5 a 50 kgꞏm², proporcionando un control fino de la entrada de calor, lo que permite la soldadura de materiales como aleaciones de wolframio. Las aplicaciones típicas incluyen conexiones de tubos de perforación de petróleo y componentes de motores aeroespaciales, donde su proceso de enfriamiento rápido reduce el crecimiento de granos mientras asegura la homogeneidad microestructural.